En el año 1118 del Señor, en la villa de
Epinoy, en Artois, nació Drogón, costando su nacimiento la vida a su madre y
cuando su padre también había muerto. Huérfano, pues, desde el momento de venir
al mundo, quedó bajo la protección y cuidado de sus más próximos parientes,
quienes le educaron en la piedad y virtudes cristianas. A los diez años de
edad, llegó a saber por una conversación que oyó a algunos individuos de la
familia, las circunstancias de su nacimiento, y creyéndose culpable de la
muerte de su madre, empezó a hacer una vida retirada y de penitencia impropia
de sus pocos años, sorprendiéndosele muchas veces llorando y pidiendo perdón a
Dios de aquello que él creía era pecado suyo.
Así continuó creciendo en edad y en virtud,
hasta que llegó a la edad de veinte años en que emprendió el género de vida
extraordinaria a que el Cielo parece lo destinaba. Había heredado de su padre,
señor de Epinoy, cuantiosas riquezas; Drogón repartió el dinero entre los
pobres; dio las fincas a los que habían cuidado de él en su niñez, y no
conservando otra cosa que la ropa que llevaba puesta, con la cual ocultaba un
martirizante cilicio, trasladóse a Seburgo, cerca de Valenciennes, donde entró
a servir a una señora piadosa y rica, cambiando su elevada posición de señor
por la humilde de criado. Su modestia, su dulzura, su obediencia y sumisión a
su señora y las atenciones que guardaba a todo el mundo, le atrajeron el amor
de los habitantes de Seburgo que le obsequiaban continuamente con algunos
regalos que él aprovechaba en beneficio de los pobres a quienes los distribuía.
¡Qué lección tan provechosa encierra la
conducta de Drogón para todos, y qué contraste ofrece con la de los mundanos!
¡Ah, si las clases populares fijasen su atención en la vida de los servidores
de Cristo y la comparasen con la de los que les adulan y extravían! ¡Cómo
correrían a abrazarse a la Cruz de Jesucristo que tales frutos produce, y huirían
de los engaños y quimeras con que el demonio quiere seducirlas! Sólo en la
religión católica se ven con abundancia ejemplos como el de San Drogón, de
renunciar a los honores, riquezas y placeres del mundo para entregarse a las más
bajas ocupaciones y confundirse con aquellos a quienes el Divino Maestro llama bienaventurados. En cambio los
aduladores, los explotadores de las multitudes, les halagan con promesas
irrealizables y con quiméricas bienandanzas, que no tienen otro fin, que
adquirir riquezas para sí, abandonando luego a los que se las proporcionaron y
procurando alejarse de ellos para que no les moleste su pobreza.
Seis años permaneció Drogón en su oficio de
criado; mas sintiéndose impulsado a llevar a cabo alguna peregrinación, despidiese
de su ama y de los habitantes de la ciudad, y marchóse a Roma a visitar los
sepulcros de San Pedro y San Pablo, y de allí a otros santuarios, viajes que
hizo a pie, pidiendo limosna y en penitencia. Ni el rigor de las estaciones, ni
la dificultad y peligro de los caminos; ni la debilidad de su cuerpo por las
grandes austeridades a que se sometía, fueron obstáculo a que continuase sus
peregrinaciones, ni a que disminuyese sus penitencias. Una enfermedad repentina
le obligó a guardar reposo; y conociendo por ella, que dios le llamaba a la
soledad y al retraimiento, empezó nueva vida en una celda cerca de la iglesia
de Seburgo, desde donde sin presentarse al público, podía asistir a los oficios
divinos. En este retiro se consagró a Dios por entero, y se ofreció a Él por
los pecados de los hombres. Allí aumentó sus mortificaciones, enardeció su amor
a Cristo crucificado y vivió más que en el mundo, en la patria que con tanto
valor había ya conquistado.
Dios quiso manifestar allí mismo el poder que
había dado a su siervo. Prendiese un día fuego a la iglesia de Seburgo por la
parte en que estaba la celda del Santo e inmediatamente se propagó a esta. Las
gentes de la ciudad acudieron en tropel y comenzaron a dar grandes voces
llamando a San Drogón para que abandonase rápidamente aquella habitación, que
por todas partes era ya pasto de las llamas. Pero el Santo, en vez de atender
las indicaciones de los que veían su vida en peligro inminente, se postró de
rodillas, elevó al cielo sus ojos y manos y dirigiendo al Todopoderoso su
humilde oración, se vio con gran sorpresa y alegría que el incendio cedía y que
al poco tiempo se extinguió por sí mismo, como si no hubiese en la atmósfera
aire para alimentarlo. Hasta los ochenta años vivió San Drogón en aquella
celda, venerado como Santo y amado como padre cariñoso. Al fin, lleno ya de
merecimientos, rico en virtudes, él que tantas riquezas había despreciado;
conquistada la corona del cielo, con la renuncia del señorío de Epinoy y
cumplido el tiempo de su peregrinación en la tierra, voló al cielo
tranquilamente en el año 1184, día 16 de abril.
Su cuerpo se quiso trasladar, a demanda de sus
parientes, a Epinoy, mas al llegar el carro que lo conducía a un lugar que
desde entonces se llama Monte de San Drogón, se paró como obligado por una
fuerza sobrenatural y no hubo medio de pasar de allí. Entonces regresaron a
Seburgo y allí fue sepultado con gran pompa, y allí se venera en nuestros días.
San drogon c fe y amor te ruego le devuelvas la audicion. A saul horacio rios. Y la fe a gonzalo y rodrigo y un gran amor a jesus eucaristia amen
ResponderEliminarPor tu vida santa y tu amistad c jesus te ruego aumentes mi fe. Y trabajo a ceci irupe gonza y rodrigo amen
ResponderEliminarSan drogon que gozas junto a jesus intercede por. Susana. Por eduardo dentino gran profeta de la iglesia catolica y les concedas salud fisica y psiqica amen
ResponderEliminarGlorioso santo danos la alegria contagiosa de los santos y que adoremos mucho al señor amen
ResponderEliminarSan drogon. Te ruego por los que estan confundidos y van por caminos faciles vuelve al señor a juan carlos amen. Haz que recemos con amor el santo rosario. Y lo enseñe a mis alumnos. Amen marisa dri
ResponderEliminarSan drogon. Nuestros jovenes pierden la esperanza. Dales fortaleza. Porque muchos van al suicidio. Mil gracias amado santo de dios
ResponderEliminarSan drogon. Nuestros jovenes pierden la esperanza. Dales fortaleza. Porque muchos van al suicidio. Mil gracias amado santo de dios
ResponderEliminarSan drogon. Nuestros jovenes pierden la esperanza. Dales fortaleza. Porque muchos van al suicidio. Mil gracias amado santo de dios
ResponderEliminarSan drogon. Te ruego por los que estan confundidos y van por caminos faciles vuelve al señor a juan carlos amen. Haz que recemos con amor el santo rosario. Y lo enseñe a mis alumnos. Amen marisa dri
ResponderEliminarSan drogon. Te ruego por los que estan confundidos y van por caminos faciles vuelve al señor a juan carlos amen. Haz que recemos con amor el santo rosario. Y lo enseñe a mis alumnos. Amen marisa dri
ResponderEliminarJaja san drogon
ResponderEliminarEl Santo drogadicto xD